miércoles, 18 de junio de 2014

La Psicología Educativa, su objeto, métodos y problemas principales.

Consideraciones  para la comprensión de la Psicología Pedagógica como disciplina científica.
En torno a la comprensión de la Psicología Educativa o Pedagógica en calidad de disciplina científica, hoy por hoy se plantean numerosas interrogantes, en el orden de las siguientes:
·   ¿es una rama de la Psicología?
·   ¿puede  ser considerada una disciplina o ciencia independiente?
·   ¿es una ciencia social, o más exactamente, una ciencia de la educación?
·   ¿es una simple extensión o extrapolación de la Psicología General?
·   ¿es una disciplina subsidiaria de la Psicología Social?
·   ¿es apenas, una práctica educativa, una disciplina tecnológico-aplicada?
El surgimiento de la Psicología Pedagógica constituye un momento cualitativamente superior del decursar histórico de los fundamentos psicológicos de la pedagogía.  Significó la aparición de una disciplina científica, en la que se integran algunos de los objetivos de estudio de la pedagogía y
de la psicología, para encontrar una explicación realmente objetiva, rigurosa, de los aspectos psicológicos del proceso pedagógico.
La paternidad de la Psicología Pedagógica, que surgió a finales del siglo XIX, como disciplina científica, es imprecisa aún en la actualidad. 
La Psicología de la Educación, desde nuestro punto de vista, es una disciplina pluriparadigmática, lo cual constituye más una ventaja que una limitación, ya que incentiva la crítica, la polémica y la reflexión de los investigadores en el área, lo que repercute en el desarrollo de la disciplina. Durante las últimas décadas, los núcleos constitutivos de esta ciencia, han sido notoriamente enriquecidos: teórico-conceptual, proyectivo y técnico-práctico.
La historia de la psicología de la educación es relativamente breve, ya que aunque su advenimiento se ubica en las postrimerías del siglo XIX, realmente se ha desarrollado en especial durante el siglo XX y los años transcurridos del nuevo milenio. Como disciplina científica tiene su propia historia, sus momentos de ventura y sus épocas de crisis, de rupturas y replanteamientos teóricos.
En sentido estricto, los principales hitos que marcaron los inicios de la Psicología Educativa como disciplina científica y tecnológica ocurrieron en los países occidentales desarrollados (Estados Unidos, Inglaterra, Francia y Suiza), a finales del siglo XIX e inicios del XX. En esos años, las escuelas y sistemas existentes, además del estructuralismo wundtiano, eran el asociacionismo y el funcionalismo, que contaban con representantes europeos y estadounidenses. Fue justo en el seno de estas dos últimas corrientes donde surgió la Psicología de la Educación.
Sin embargo, otras escuelas teóricas psicológicas y corrientes pedagógicas de la época tuvieron un significativo impacto en el desarrollo del corpus fundamental de la psicología educativa, así, el conductismo, el gestaltismo, el psicoanálisis y el cognitivismo, la escuela nueva y los avances en materia de la teoría de la educación de finales del siglo XIX.
Apenas surge la psicología como disciplina científica, uno de los campos de su aplicación que comenzó a llamar la atención inmediata de los psicólogos, fue el área educativa. De esta manera se fue gestando la aplicación de la psicología a las múltiples facetas de lo educacional y poco a poco se fue justificando su participación dentro de las ciencias de la educación.
Diferentes autores coinciden en señalar que la psicología de la educación fue influida por tres tradiciones fundamentales, que propiciaron su génesis y ulterior desarrollo como disciplina independiente. Como tales, son identificados׃
·   El estudio de las diferencias individuales enraizado en el enfoque psicométrico.
·   Los estudios de la psicología evolutiva.
·   Los estudios sobre la psicología del aprendizaje.
La Psicología Educativa es considerada por algunos como una ciencia social, aunque lo más exacto sería, en nuestra opinión, considerarla como una ciencia de la educación. Hoy por hoy, se requiere de la participación y colaboración de múltiples disciplinas, que desde perspectivas disímiles, expliquen las diferentes dimensiones y contextos de la educación como fenómeno sociohistórico-cultural complejo. La Psicología Pedagógica tiene un importante rol en este sentido, al comprender, describir, explicar y contribuir a la mejora del fenómeno educacional desde su perspectiva psicológica.
 Así pues, la Psicología Educativa estudia los procesos psicológicos que ocurren en el ámbito educacional en sentido amplio, las leyes y regularidades psicológicas del proceso docente-educativo. Ella describe, explica e investiga las manifestaciones y fundamentos psicológicos de la educación. Pero además, interviene en el proceso educativo-didáctico, contribuyendo a su perfeccionamiento. Estas “misiones” de la Psicología Pedagógica, guardan una estrecha relación con sus componentes o núcleos básicos.
Diferentes hipótesis han pretendido develar los vínculos entre la Psicología General y la Psicología de la Educación, históricamente. Los planteamientos esenciales realizados en esta dirección, son los siguientes:
1)  Hipótesis de extrapolación-traducción.
Según este presupuesto, la Psicología Educacional es una mera extensión o aplicación de la Psicología General.
2)  Hipótesis de independencia.
Alude a la autonomía total de la Psicología Educativa respecto a la Psicología General, punto de vista difundido posteriormente a la II Guerra Mundial. La versión extrema de esta hipótesis ha sido desmentida por el propio devenir de la Psicología Educativa y actualmente es refutada por los estudiosos de esta área. La posición más discreta, se ha añadido a la tercera postura, que es la más aceptada en nuestros días.
3)  Hipótesis de interdependencia-interacción.
Es la alternativa que se privilegia en los textos y por los autores contemporáneos de la Psicología de la Educación. La Psicología de la Educación es considerada como una disciplina de carácter tecnológico-aplicada, relacionada con la Psicología General y con la educación.
Esto no supone, sin embargo, que la Psicología Educativa sea reductible a alguna de las disciplinas de las cuales se nutre, como la Psicología General, la Psicología Social, la Psicología Evolutiva, la Pedagogía, la Didáctica General, la Filosofía y la Sociología de la Educación. Como disciplina científica tiene sus especificidades propias que se traducen en lo peculiar de su objeto de estudio, de sus métodos y de sus bases teórico-metodológicas.
Un análisis del desarrollo histórico, relativamente corto, de la Psicología Educativa, permite realizar reflexiones  en torno a la misma como las que siguen a continuación:
Las necesidades de la práctica pedagógica, son consideradas como uno de los factores que apresuraron el proceso de construcción de la ciencia psicológica.   Por otra parte, los propios avances de la investigación psicológica aportaron nuevas concepciones y métodos a la actividad pedagógica. Esta confrontación de circunstancias propiciaron la aparición de la psicología pedagógica  o de la educación, en primera instancia, como una psicología aplicada a la educación, en particular de la psicología infantil, y luego como una disciplina especial de las ciencias de la educación.
En la actualidad, todos aceptan el carácter de disciplina científica de la psicología pedagógica, aunque existen diferencias en cuanto a la determinación de su naturaleza y por ende de las funciones que cumple como ciencia de la educación, lo que repercute en la determinación de su objeto de estudio y su propia conceptualización.
En este sentido hay autores que consideran que la naturaleza de la psicología pedagógica está en el carácter de ciencia aplicada a la educación, lo que conlleva a trasladar los resultados investigativos de la psicología, en particular de la psicología evolutiva, del aprendizaje, individual y de la personalidad al proceso pedagógico. De aquí, que su función sea proporcionar los datos de la ciencia a los pedagogos, programadores de la educación y a los propios maestros para mejorar sus prácticas; atemperándolas con los resultados de las ciencias.
Esta  posición tiene una larga historia con diferentes matices, esencialmente en autores norteamericanos y en algunos de Europa Occidental. Ejemplos de ellos son:
·         E. Thorndike, quien  aplicó en su Educacional Psychology las leyes o principios del aprendizaje descubiertos en situación experimental de laboratorio al salón de clases.
·         En trabajos realizados a finales de la década del 50 en los EE.UU. como es el caso de la Dra. Alice Crow en su "An outline of Educational Psychology" se señala que: "Las bases científicas de la educación están en la psicología educacional como una ciencia aplicada que aporta un conjunto de principios y de datos acerca de la conducta humana en situaciones de aprendizaje" (1)
Se declara abiertamente el carácter aplicado de los conocimientos de la psicología como ciencia en general a la educación y más adelante se precisa con respecto a la psicología educativa:
"¿Cuáles son las leyes del aprendizaje?  ¿Qué sabemos sobre el retraso intelectual?  ¿Cuál es la naturaleza del desarrollo personal?  Las respuestas a estas preguntas son algunas de las que constituyen la ciencia educativa, y aunque de desarrollo reciente, la psicología educativa comienza a desempeñar tal función explicativa.  Durante las últimas décadas, sus resultados y teorías han encontrado una aceptación cada vez mayor en la práctica de la clase". (2)
Esta posición conlleva a concebir a la psicología educativa como una "ciencia auxiliar" de la pedagogía o más propiamente de la educación.
  • Otro clásico de la materia como W.A. Kelly define que: "La finalidad de la Psicología Pedagógica no se limita a la mera presentación de hechos y técnicas, ni a la definición de leyes y principios.  Más importantes es el énfasis que da a la aplicación de estos a los problemas, materias y métodos del proceso educativo".  (3)
Finalmente, este autor puntualiza que: "La preocupación primaria de la Psicología Pedagógica es la aplicación del conocimiento científico relativo a la personalidad humana al proceso de enseñanza, es decir, a la motivación, dirección, control y evaluación de la facultad de aprender.  De acuerdo con esta finalidad, trata de proporcionar la comprensión, tanto del discípulo como del proceso de instrucción y enseñanza que dirigen y guían el crecimiento y desarrollo de aquel.   Esto supone la selección, organización, interpretación e integración de los hechos, materiales, técnicas y principios que, dentro el alcance global de la Psicología, repercuten directamente en el proceso educativo". (4)
En esta obra de Kelly resalta la inconsistencia denominativa de esta nueva rama de la psicología aplicada a la educación, o ciencia auxiliar de la misma. Una forma particular del enfoque aplicativo del que tratamos como se habrá podido advertir, es concebir a los contenidos psicológicos como elaboraciones teóricas- prácticas para auxiliar o guiar la labor del docente, por lo que abundan obras bajo el título de Psicología para Maestros.
Una forma más particular aún, de este enfoque de la psicología aplicada, pero que no excluye en algunos autores el admitir o al menos operar con el carácter de disciplina científica independiente de la Psicología Pedagógica, es la tendencia de la denominada Psicología Escolar.  Sin embargo, resulta necesario destacar que este enfoque se mueve más en los fundamentos psicológicos de la solución de los problemas de la escuela mediante su detección y labor de orientación; en este sentido es referido entonces, esencialmente, al aspecto de la profesión de psicólogo escolar, orientador educativo o psicopedagógico que a la problemática cienciológica.
La otra tendencia actual, reconoce la psicología pedagógica como una ciencia límite o limítrofe, por lo que tiene su propia estructura y particularidades como disciplina científica, en la que se integran, pero a su vez, se diferencian, los rasgos de la pedagogía y de la psicología como ciencias que le dan origen.  En este sentido, hay un intento por definir su propia naturaleza, su objeto de estudio y los métodos científicos que le permiten estructurar su cuerpo teórico en un conjunto de conocimientos, leyes, regularidades y teorías, acerca del proceso pedagógico en toda su multiplicidad, que se ha construido en las condiciones de la práctica educativa, y no por generalizaciones o aplicaciones procedentes unilateralmente de la pedagogía o de la psicología.
Así, por ejemplo, A. V. Petrovsky define que: "el objeto de la psicología pedagógica es estudiar las leyes psicológicas de la enseñanza y la educación." (5)
Se resalta la unidad de objeto de estudio de la psicología y la pedagogía, dada por una nueva disciplina del conocimiento para la develación de las leyes y regularidades identificadas en un propio cuerpo conceptual, para la investigación y educación de los estudiantes.
De esta manera podemos concebir a la psicología pedagógica o educativa como una ciencia, ya que cumple con los requisitos necesarios para la misma.
 LA PSICOLOGÍA EDUCATIVA, en tanto disciplina de carácter científico, cumple los requerimientos de…
1-    Poseer un objeto de estudio.
2-    Poseer métodos de investigación propios.
3-    Poseer una base metodológica.
En cuanto a la estructura de la psicología pedagógica, esta se corresponde con los elementos propios de una ciencia social joven en desarrollo: objeto de estudio, método científico, sistema de principios y un cuerpo teórico.
 Su objeto de estudio es referido a las particularidades psicológicas de los sujetos, esencialmente en las edades infantiles, adolescentes y juveniles, pero se centra en el análisis de su proceso de formación y desarrollo, en las condiciones de la educación y la enseñanza.  Al igual que la pedagogía, se ocupa de un mismo proceso de formación de la personalidad del hombre, pero remarcando su faceta psicológica, las leyes y regularidades intrínsecas, que explican los mecanismos, las formas en que tiene lugar el desarrollo en las condiciones del proceso educativo.
El fin de la ciencia psicológica es conocer e interpretar la realidad psíquica y contribuir a transformarla.
Se adopta la dialéctica materialista, como método general que permite la incorporación de diversos métodos y técnicas que se combinan según la naturaleza del problema a investigar, los métodos lógicos generales, con los propios del conocimiento científico, ya sean empíricos o teóricos, o su concepción estratégica en determinadas metódicas, siendo esta su base metodológica.
Los principios de la psicología pedagógica representan, por su parte, las leyes más generales de esta ciencia y expresan la correspondencia esencial, de la explicación científica del desarrollo del psiquismo con las acciones educativas que lo propician y optimizan.
Finalmente, la psicología pedagógica está constituida por un cuerpo teórico, dado en su aparato categorial y conceptual, los conocimientos concretos o fácticos acerca de su objeto de investigación, así como aquellas regularidades que lo explican, y que constituyen sus teorías, que se afilian a posiciones filosóficas y gnoseológicas de los autores en corrientes y escuelas.
La Psicología Educativa que defienden las autoras de este material, tiene como bases esenciales el materialismo dialéctico e histórico, lo que en modo alguno significa el menosprecio de otras posiciones, escuelas y teorías con basamentos filosóficos diferentes, ya que la propia dialéctica materialista llama nuestra atención en aras de aprovechar el legado positivo de todas las teorías o hipótesis que han sido negadas, en el sentido dialéctico, por nuestra filosofía.
El campo de acción de la psicología pedagógica ha sido definido de diversas maneras, según  la conceptualización de su objeto de estudio, pero a los efectos de la posición que se analiza, el mismo tiene tres grandes áreas:
1-Los aspectos psicológicos que permiten el cumplimiento de la unidad instrucción-educación.  Es decir, aquellos elementos psicológicos que permiten una enseñanza, que eduque las cualidades de la personalidad de los alumnos en consonancia con los valores socialmente definidos como positivos.  Aquí se incluyen los aspectos de la teoría de la enseñanza que sirven de base al desarrollo de la Didáctica General y las Didácticas Especiales, ajustados a las particularidades evolutivas de las edades de los estudiantes.
En este aspecto se incluye un amplio espectro de temáticas que varían según las corrientes y teorías psicológicas que se animan en una proyección pedagógica dada, en cuanto a la forma en que se concibe a la educación, su determinación histórico-concreta, su función social y formativa de la personalidad según  la naturaleza humana.
2-La formación de la personalidad como proceso dirigido, en cuanto al desarrollo de la individualidad humana como aquellos rasgos típicos como sujeto social, así como, el logro de su integridad dada en la unidad de los procesos cognoscitivos con los motivacionales-afectivos.
3-Los fundamentos psicológicos del proceso de enseñanza y educación escolarizado, y los elementos que deben contemplar el no escolarizado.
Este campo de acción de la psicología pedagógica se manifiesta en un grupo de problemas que serán analizados más adelante.
 En Psicología, los métodos de investigación se clasifican en  generales (la observación y el experimento) y particulares (la entrevista, los tests, etc.). Unos y otros, se emplean por la Psicología Educativa, en correspondencia con las especificidades de su objeto de análisis.
Es importante destacar algunos de los métodos empleados en esta área, en calidad de enfoques investigativos importantes (genéticos): el método del estudio longitudinal y el del corte transversal, muy ligados ambos, a la exploración en la psicología evolutiva.
Por otra parte, es bueno resaltar el papel de los métodos experimentales en la investigación psicopedagógica, ya que la Psicología Educativa no solo es una ciencia descriptiva y explicativa, sino también una ciencia “revolucionadora” de la realidad educacional. En tal sentido, es muy importante aludir al empleo de los experimentos, especialmente de carácter indirecto, para develar los aspectos psicológicos del fenómeno educacional, así, el empleo de dilemas morales, el completamiento de diálogos de carácter conflictivo y la selección y argumentación de opciones dentro de alternativas múltiples ofrecidas por el investigador.
De igual manera, en la Psicología Pedagógica ha proliferado en las últimas décadas, el uso de metódicas de carácter experimental, originalmente tomadas de la Patopsicología. La Patopsicología es una disciplina científica surgida en la ex־Unión Soviética y destinada al estudio de las alteraciones patopsicológicas de la psiquis.
Las metódicas patopsicológicas suponen la solución, por el sujeto, de un sistema de tareas con un enfoque experimental, combinando el empleo de este método con otros como la observación y los métodos de interrogatorio. Hoy por hoy se usan no solo para la exploración de personas enfermas, sino también para la de personas sanas, con una metodología similar. Su utilidad en la esfera educativa, es ampliamente reconocida.
Las metódicas patopsicológicas experimentales se diferencian, básicamente, de los tests psicológicos, por varias razones cruciales:
·   Constituyen una variante de experimento natural.
·   Se aplican de forma estrictamente individual (esto es muy útil para la Psicología Educativa, ya que los estudios en esta área han privilegiado el análisis de tendencias, de lo grupal, con el consecuente menosprecio de lo individual, que es indudablemente de imprescindible necesidad para la dirección efectiva del proceso pedagógico9.
·   Exigen de la observación constante del investigado.
·   Exigen protocolizar las expresiones verbales y no verbales del sujeto experimental.
·   Hacen énfasis en el proceso, más que en el resultado.
·   Jerarquizan prioritariamente el análisis cualitativo respecto al enfoque cuantitativo.
·   Su enfoque es dinámico, activo, interactivo.
·   Permiten evaluar no solo la zona de desarrollo actual del sujeto, sino también su zona de desarrollo próximo.
·   Permiten ofrecer ayudas al educando, para la solución de las tareas experimentales planteadas, dosificar las ayudas y evaluar los niveles de ayuda requeridos.
·   Su objetivo es esencialmente diagnóstico, pero pueden servir, igualmente, con fines de entrenamiento.
En el campo pedagógico, como ya hemos señalado, ellas tienen una amplia aplicación. Entre las metódicas más difundidas en esta esfera, se destacan el cuarto excluido, el pictograma, el aprendizaje de 10 palabras, la reproducción de relatos, la interpretación de refranes y metáforas, el completamiento de relatos, la simultaneidad de los signos, Klipets, la autoescala de Dembo-Rubinstein, la metódica de Hoope, la elección de valores y otras.
La comprensión materialista dialéctica de los fenómenos psíquicos  se expresa en la psicología a través  de un sistema de principios  que orientan  la investigación psicológica, tanto teórica como práctica:
-Principio del determinismo materialista- dialéctico de la psiquis.
-Principio de la naturaleza social de la psiquis humana.
-Principio de la unidad de la psiquis - actividad.
PROBLEMAS ACTUALES QUE AFRONTA  LA PSICOLOGÍA PEDAGÓGICA.
1-Problemas metodológicos del desarrollo de la psiquis, la conciencia y la personalidad de los educandos.
2-Determinación de criterios para el logro de una enseñanza desarrolladora en un proceso unitario, de integración de la instrucción y la educación.
3-Caracterización de los tipos fundamentales de actividades y las formas de comunicación incidentes en el desarrollo psíquico del educando, adecuado a las particularidades evolutivas de las edades y condiciones formativas en cuanto a la dinámica de lo individual con lo grupal, lo colectivo y lo social.
4-Fundamentos de la atención a las diferencias individuales o del cumplimiento del principio de la individualización de la educación.
5-Las teorías del aprendizaje, como fundamento de la dirección de la actividad cognoscitiva de los estudiantes.
Estos problemas, al ser abordados por la Psicología Pedagógica, conducen al establecimiento de diferentes ramas o derivaciones que han sido definidas por las tendencias científicas desarrolladas en Europa Oriental como:  Psicología de la Enseñanza, Psicología de la Educación y Psicología de la Personalidad (o la Actividad) del Profesor; y realmente más que ramas constituyen aspectos esenciales que es necesario tener en cuenta, para la instrumentación de un proceso pedagógico que verdaderamente propicie la formación plena del hombre en sus diferentes etapas de desarrollo.
Es evidente la diversidad de interpretaciones de la relación pedagogía-psicología que existen en la contemporaneidad, lo que indica la importancia y necesidad de estudios cienciológicos o a la luz de la filosofía de la ciencia y la epistemología, como suelen denominárseles en el mundo occidental.
La adecuada interpretación de esta relación es determinante para el establecimiento de los necesarios fundamentos psicológicos de la pedagogía, dados en nuestra concepción, en la psicología pedagógica como nueva disciplina limítrofe del conocimiento científico.
Con ello, se evitarán errores tales como la psicologización del proceso pedagógico de negativas consecuencias para concebir a la educación en su esencia multidisciplinaria, social y activa, ya que se tiende a atender prioritariamente en el aula, por una parte, al desarrollo de procesos psíquicos como los sensoperceptuales, la memoria, la imaginación, el pensamiento y sus condiciones y facetas diversas de expresión como son la atención, el lenguaje y la creatividad, respectivamente; cuyo estudio se hace frecuentemente desligado de los procesos emocionales y volitivos.
Este es un enfoque estructuralista, fragmentador y convencional de la educación, que atenta contra la unidad funcional del psiquismo humano dado en la personalidad y que pone en primer plano no a la psicología pedagógica como ciencia de la educación, sino a la psicología general y conduce frecuentemente al enfoque de la psicología como ciencia aplicada a la educación, anteriormente criticado.
Por otra parte, es frecuente ir al polo opuesto, o sea, ubicar a la personalidad como producto más acabado de la psiquis, como único y absoluto centro del accionar pedagógico, en un proceso de “personalización” de la pedagogía como ciencia de la educación.  Este error es azuzado por un desmedido humanismo en el enfoque de la educación y por el avance de un conjunto de tendencias personológicas en el campo de la psicología que resaltan a sobremanera, en algunos casos, la subjetividad humana, en detrimento de la unidad de lo genético y lo social apropiado en la personalidad en su contexto cultural-histórico-concreto.
No hay dudas de la necesaria y justa reconstrucción científica de la psicología pedagógica para que pueda erigirse sobre los escollos de las interpretaciones tendenciosas, preparar a los educadores cubanos y latinoamericanos para asumir una posición crítica acertada, sin deslumbramientos, ni apasionamiento.  De esta manera la psicología pedagógica pasará a ser de una materia o asignatura más en la formación del maestro, en una herramienta para construir su práctica pedagógica, enriquecedora de experiencias novedosas, actualizadas y contextualizadas, que a la larga elevarán la eficiencia y calidad de su labor educativa sobre una sólida plataforma científica.
No queda dudas, de la necesidad de que el pedagogo contemporáneo sea un auténtico psicólogo. Como dijera K. D. Ushinski, “nosotros no le decimos a los pedagogos que obren de esta manera o de esta otra; pero sí les decimos: estudien las leyes de aquellos fenómenos psíquicos que ustedes quisieran dirigir y condúzcanse de acuerdo con estas leyes y con las circunstancias en las que quisieran aplicarlas”(6).
IMPORTANCIA DE LA PSICOLOGÌA PARA EL TRABAJO DEL EDUCADOR
La  Psicología  constituye una ciencia imprescindible para el trabajo del educador. Ella aporta elementos teóricos indispensables  para la correcta dirección del proceso docente-educativo.
El estudio de la Psicología permite al profesor-conocer las leyes  que explican el proceso de aprendizaje, la formación de hábitos y habilidades en la actividad de estudio, así como aspectos relativos  a la dirección del proceso  educativo: cómo establecer  la comunicación profesor- alumno de manera  tal que esta ejerza una influencia educativa favorable en la personalidad de los educandos,  cómo trabajar con los alumnos que presentan dificultades de aprendizaje, de conducta u otras.
 Para que el profesor pueda cumplir con su tarea fundamental  de contribuir a la formación de la personalidad  de los educandos, no le basta con  poseer sólidos conocimientos de la disciplina, sino que es necesario que ejerza conscientemente una influencia educativa en sus alumnos; para ello le es imprescindible los conocimientos acerca de  la psicología del profesor. Debe conocer, además, las particularidades  del desarrollo psíquico  de los educandos en sus diferentes etapas de desarrollo.
Pero la Psicología  no solo brinda al profesor los elementos teóricos  para que logre ejercer  con efectividad  su trabajo docente-educativo, es además una herramienta  de trabajo en manos del profesor  en la medida que le proporciona  los elementos metodológicos necesarios  para abordar acertadamente  a través de la investigación científica,  la solución a los problemas  que se le presentan tanto en el orden docente, como educativo.

 REFERENCIAS
 (1)  Alice Crow (1958).  An outline of educational psychology. pág. 4.
 (2)   Idem, pág. 3.
(3) W.A. Kelly (1967).  Psicología de la Educación.  Tomo I.  Psicopedagogía fundamental y didáctica. ,  pág. 4.
(4)   Ibidem.
(5)  A. V. Petrovsky (1980). Psicología Evolutiva y Pedagógica, pág. 7.
(6) T. Mújina, N. Cherkes Zade, V. Rechetnikov. Conferencias sobre Psicología Pedagógica, pág. 28.

BIBLIOGRAFÍA
-Materiales preparados por el profesor.
-Viviana González Maura y otros.  Psicología para Educadores.  Editorial Pueblo y Educación.  Ciudad de La Habana, 1995.
-  A.V. Petrovsky.  Psicología Evolutiva y Pedagógica. Editorial Pueblo y Educación,  Ciudad de La Habana, s/a.
- ETAPAS DEL DESARROLLO PSICOSOCIAL Y COGNITIVO. En Psicología aplicada a la enseñanza. Robert F.Biehler/Jack Snowman .LIMUSA.  Grupo NORIEGA EDITORES, 1992.
-G. Hernández Rojas. Paradigmas en Psicología de la Educación. Ediciones Paidós, México, 1998.
- Alice Crow.  An outline of educational psychology. Littlefield, Adams G. Co. Iowa, 1958.
- W.A. Kelly. Psicología de la Educación.  Tomo I.  Psicopedagogía fundamental y didáctica.  Ediciones Morata.  Madrid, 1967.
-T. Mújina, N. Cherkes Zade, V. Rechetnikov. Conferencias sobre Psicología Pedagógica. Editorial de Libros para la Educación,  Ciudad de La Habana, 1981. 

 La Psicología Educativa, su objeto, métodos y problemas principales.
Dra. C. Silvia Colunga Santos
Dra. C. Georgina Amayuela Mora
CECEDUC, Universidad de Camagüey, Cuba

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